Encontrados 52 resultados para: Velo

  • el arca con sus andas, la tapa y el velo que los protege; (Exodo 35, 12)

  • Hicieron, además, el velo de púrpura violeta y escarlata, de carmesí y de lino fino reforzado, y lo adornaron con figuras de querubines diseñadas artísticamente. (Exodo 36, 35)

  • la cobertura de cueros de carnero teñidos de rojo, la cobertura de pieles finas y el velo protector; (Exodo 39, 34)

  • Allí pondrás el Arca del Testimonio y la protegerás con el velo. (Exodo 40, 3)

  • Entonces condujo el arca hasta el interior de la Morada, colgó el velo que la protegía y así cubrió el Arca del Testimonio, conforme a la orden que el Señor le había dado. (Exodo 40, 21)

  • Luego mojará su dedo en la sangre y con ella hará siete aspersiones delante del Señor, frente al velo del Santuario. (Levítico 4, 6)

  • Luego mojará su dedo en la sangre y con ella hará siete aspersiones delante del Señor, frente al velo del Santuario. (Levítico 4, 17)

  • Él le dijo: Ordena a tu hermano Aarón que no entre en cualquier momento en la parte del Santuario que está detrás del velo, frente a la tapa que cubre el Arca. De lo contrario morirá, porque yo me aparezco en la nube, sobre la tapa del Arca. (Levítico 16, 2)

  • y después tomará un incensario lleno de brasas extraídas del altar que está delante del Señor, y dos puñados de incienso aromático pulverizado. Llevará todo esto detrás del velo, (Levítico 16, 12)

  • En seguida inmolará el chivo para el sacrificio por el pecado del pueblo y llevará su sangre detrás del velo. Allí hará con ella lo mismo que hizo con la sangre del novillo: hará las aspersiones sobre la tapa y delante de ella. (Levítico 16, 15)

  • Pero no entrará detrás del velo ni se acercará al altar; él tiene un defecto corporal y no debe profanar esos lugares que me están consagrados, porque yo soy el Señor, que los santifico. (Levítico 21, 23)

  • Aarón deberá prepararla en la Carpa del Encuentro, fuera del velo que está ante el Arca del Testimonio, para que arda regularmente delante del Señor, durante toda la noche. Este es un decreto válido para siempre, a lo largo de las generaciones. (Levítico 24, 3)


“Uma Missa bem assistida em vida será mais útil à sua salvação do que tantas outras que mandarem celebrar por você após sua morte!” São Padre Pio de Pietrelcina