Encontrados 50 resultados para: prescripciones

  • Son muchos los que me persiguen y me oprimen, pero yo no me desvié de tus prescripciones. (Salmos 119, 157)

  • Mi alma observa tus prescripciones, y las ama intensamente. (Salmos 119, 167)

  • Yo observo tus mandamientos y tus prescripciones, porque tú conoces todos mis caminos. (Salmos 119, 168)

  • Apenas ella terminó de hablar, el joven dijo: "¿Qué esperan? Yo no obedezco el decreto del rey, sino las prescripciones de la Ley que fue dada a nuestros padres por medio de Moisés. (II Macabeos 7, 30)

  • ¡Ay de los que promulgan decretos inicuos y redactan prescripciones onerosas, (Isaías 10, 1)

  • nosotros hemos pecado, nos hemos hecho impíos, hemos incurrido en la injusticia, Señor, Dios nuestro, desobedeciendo todas tus prescripciones. (Baruc 2, 12)

  • El hombre me dijo: Hijo de hombre, así habla el Señor: Estas son las prescripciones concernientes al altar, cuando sea erigido para ofrecer el holocausto sobre él y rociarlo con sangre. (Ezequiel 43, 18)

  • El Señor me dijo: Presta atención, hijo de hombre; mira bien, y escucha cuidadosamente lo que te voy a decir acerca de todas las prescripciones concernientes a la Casa del Señor y a todo su ritual. Ten bien en cuenta quiénes podrán ser admitidos en la Casa del Señor y quiénes deberán ser excluidos del Santuario. (Ezequiel 44, 5)

  • Por más que escriba para él mil prescripciones de mi Ley se las tendría por una cosa extraña. (Oseas 8, 12)

  • Conducido por el mismo Espíritu, fue al Templo, y cuando los padres de Jesús llevaron al niño para cumplir con él las prescripciones de la Ley, (Lucas 2, 27)

  • Cuando los paganos, que no tienen la Ley, guiados por la naturaleza, cumplen las prescripciones de la Ley, aunque no tengan la Ley, ellos son ley para sí mismos, (Romanos 2, 14)

  • Al contrario, el que no está circuncidado, pero observa las prescripciones de la Ley, será tenido por un verdadero circunciso. (Romanos 2, 26)


“Que Jesus reine sempre soberano no seu coração e o faça cada vez mais digno de seus divinos dons.” São Padre Pio de Pietrelcina