Encontrados 195 resultados para: utensilios de bronce

  • Tomaron también las ollas, las palas, los cuchillos, los aspersorios, las fuentes y todos los utensilios de bronce que servían para el culto. (Jeremías 52, 18)

  • En cuanto a las dos columnas, al único Mar de bronce, a los doce bueyes de bronce que lo sostenían y a las bases que había hecho el rey Salomón para la Casa del Señor, no se podía evaluar el peso de bronce de todos esos objetos. (Jeremías 52, 20)

  • Estaba rematada por un capitel de bronce, y la altura del capitel era de dos metros y medio. Sobre el capitel, todo alrededor, había una moldura en forma de red y de granadas, todo de bronce. La segunda columna, con sus granadas, era igual a la primera. (Jeremías 52, 22)

  • Sus piernas eran rectas; sus pies, como pezuñas de ternero, y resplandecían con el fulgor del bronce bruñido. (Ezequiel 1, 7)

  • Entonces llegaron seis hombres del lado de la puerta superior que mira hacia el norte, cada uno con su instrumento de destrucción en la mano. En medio de ellos había un hombre vestido de lino, con la cartera de escriba en la cintura. Todos entraron y se detuvieron delante del altar de bronce. (Ezequiel 9, 2)

  • Coloca luego la olla vacía sobre las brasas, para que se recaliente y el bronce se ponga al rojo vivo, para que se fundan las impurezas dentro de ella y se consuma su herrumbre. (Ezequiel 24, 11)

  • Javán, Tubal y Mésec traficaban contigo: entregaban esclavos y objetos de bronce a cambio de tus mercancías. (Ezequiel 27, 13)

  • Él me llevó hasta allí, y yo vi a un hombre que por su aspecto parecía de bronce, con una cuerda de lino y una vara de medir en la mano. Estaba de pie en el pórtico. (Ezequiel 40, 3)

  • Su cabeza era de oro fino; su pecho y sus brazos, de plata; su vientre y sus caderas, de bronce; (Daniel 2, 32)

  • Entonces fueron pulverizados al mismo tiempo el hierro, la arcilla, el bronce, la plata y el oro; fueron como la paja en la era durante el verano: el viento se los llevó y no quedó ningún rastro. En cuanto a la piedra que había golpeado la estatua, se convirtió en una gran montaña, y llenó toda la tierra. (Daniel 2, 35)

  • Después de ti surgirá otro reino inferior a ti, y luego aparecerá un tercer reino, que será de bronce y dominará sobre toda la tierra. (Daniel 2, 39)

  • porque tú has visto, que una piedra se desprendía de la montaña, sin la intervención de ninguna mano, y ella pulverizó el hierro, el bronce, la arcilla, la plata y el oro. El Dios grande hace conocer al rey lo que va a suceder en adelante. El sueño es cierto y su interpretación digna de fe". (Daniel 2, 45)


“Quando ofendemos a justiça de Deus, apelamos à Sua misericórdia. Mas se ofendemos a Sua misericórdia, a quem podemos apelar? Ofender o Pai que nos ama e insultar quem nos auxilia é um pecado pelo qual seremos severamente julgados.” São Padre Pio de Pietrelcina