Encontrados 272 resultados para: Último Capítulo de Josué

  • se presentaron a Zorobabel, a Josué y a los cabezas de familia y les dijeron: "Dejadnos colaborar con vosotros en la construcción, ya que nosotros, lo mismo que vosotros, adoramos a vuestro Dios y le ofrecemos sacrificios desde cuando Asaradón, rey de Asiria, nos trajo aquí". (Esdras 4, 2)

  • Pero Zorobabel, Josué y los otros cabezas de familia de Israel les contestaron: "Eso no puede ser; debemos construirlo nosotros solos para el Señor, Dios de Israel, como nos ha ordenado Ciro, rey de Persia". (Esdras 4, 3)

  • Zorobabel, hijo de Sealtiel, y Josué, hijo de Yosadac, decidieron reanudar la reconstrucción del templo de Dios en Jerusalén, con la asistencia de los dos profetas de Dios, que estaban con ellos animándoles. (Esdras 5, 2)

  • al cabo de los cuales se pesó la plata, el oro y los utensilios en el templo de nuestro Dios y se entregó todo al sacerdote Merimot, hijo de Urías, a quien acompañaba Eleazar, hijo de Fineés; estaban con ellos los levitas Yozabad, hijo de Josué, y Noadías, hijo de Binuy. (Esdras 8, 33)

  • Ésta es la relación de los miembros del sacerdocio que se habían casado con mujeres extranjeras. Entre los descendientes de Josué, hijo de Yosadac, y entre sus hermanos: Maasías, Eliezer, Yarib y Guedalías. (Esdras 10, 18)

  • después Ézer, hijo de Josué, jefe de Mispá, reparó otro tramo frente a la subida de la armería hasta el ángulo. (Nehemías 3, 19)

  • Vinieron con Zorobabel, Josué, Nehemías, Azarías, Raamías, Najamaní, Mardoqueo, Bilsán, Mispéret, Bigvay, Najún y Baaná. Número de los hombres del pueblo de Israel: (Nehemías 7, 7)

  • descendientes de Pajat Moab, es decir, de Josué y Joab: dos mil ochocientos dieciocho; (Nehemías 7, 11)

  • Sacerdotes: de Yedayas, de la casa de Josué: novecientos setenta y tres; (Nehemías 7, 39)

  • Levitas: de Josué y Cadmiel, de los hijos de Hodías: setenta y cuatro. (Nehemías 7, 43)

  • Los levitas Josué, Baní, Serebías, Jamín, Acub, Sabtay, Hodiyías, Maasías, Quelitá, Azarías, Yozabad, Janán y Pelayas explicaban la ley al pueblo mientras el pueblo permanecía en pie. (Nehemías 8, 7)

  • Toda la comunidad de los repatriados hizo cabañas y se instaló en ellas. Desde los tiempos de Josué, hijo de Nun, no habían hecho una cosa así los israelitas hasta aquel día. Y la alegría fue inmensa. (Nehemías 8, 17)


“O Senhor nos dá tantas graças e nós pensamos que tocamos o céu com um dedo. Não sabemos, no entanto, que para crescer precisamos de pão duro, das cruzes, das humilhações, das provações e das contradições.” São Padre Pio de Pietrelcina