Encontrados 72 resultados para: alimento divino

  • él da el alimento a los ganados y a las crías del cuervo cuando chillan. (Salmos 147, 9)

  • Abasteció a las ciudades de alimento, las dotó de defensas convenientes y su nombre fue glorioso hasta el fin del mundo. (I Macabeos 14, 10)

  • Heliodoro respondió: "Si tienes alguna persona contraria y enemiga de tu gobierno, envíala allá, y la harás volver bien castigada, si es que consigue volver. En aquel lugar hay un poder divino. (II Macabeos 3, 38)

  • durante el verano prepara su alimento, y recoge durante la siega su comida. (Proverbios 6, 8)

  • No codicies sus delicados manjares; es un alimento engañoso. (Proverbios 23, 3)

  • Dichoso también el eunuco cuyas manos no hicieron la maldad y que no alimentó malos pensamientos contra el Señor, pues le será dado especial galardón por su fidelidad y un puesto agradable en el templo del Señor. (Sabiduría 3, 14)

  • Y la multitud, reducida por el encanto de la obra, tiene ahora como ser divino al que poco antes tenía como hombre. (Sabiduría 14, 20)

  • En vez de tal castigo favoreciste a tu pueblo; para satisfacción de su ardiente apetito, le preparaste como alimento un manjar exquisito: codornices. (Sabiduría 16, 2)

  • Y así aquéllos, aunque estaban ansiosos de alimento, ante el aspecto repugnante de los animales que les enviaste, perdieron las ganas de comer; mientras que tu pueblo, después de una breve privación, gustó un manjar exquisito. (Sabiduría 16, 3)

  • A tu pueblo, en cambio, le diste alimento de ángeles, le procuraste desde el cielo un pan preparado sin trabajo por su parte, capaz de dar todo placer y acomodado al gusto de cada uno. (Sabiduría 16, 20)

  • Los hijos santos de los justos ofrecían sacrificios en secreto, y de común acuerdo establecieron el pacto divino de que los santos compartiesen igualmente bienes y peligros, cantando antes las alabanzas de los padres. (Sabiduría 18, 9)

  • Las llamas, por el contrario, no consumían las carnes de endebles animales que en ellas se movían, ni se derretía aquel alimento celestial, semejante al rocío y tan frágil como él. (Sabiduría 19, 21)


“Mesmo quando perdemos a consciência deste mundo, quando parecemos já mortos, Deus nos dá ainda uma chance de entender o que é realmente o pecado, antes de nos julgar. E se entendemos corretamente, como podemos não nos arrepender?” São Padre Pio de Pietrelcina