Encontrados 869 resultados para: espada del Espíritu

  • pero los de Benjamín salieron a su encuentro desde Guibeá y mataron a otros dieciocho mil israelitas diestros en el manejo de la espada. (Jueces 20, 25)

  • El Señor derrotó a Benjamín ante Israel, y los israelitas mataron aquel día veinticinco mil cien benjaminitas diestros en el manejo de la espada. (Jueces 20, 35)

  • Los emboscados se desplegaron rápidamente sobre Guibeá, y pasaron a espada a toda la ciudad. (Jueces 20, 37)

  • El total de los que cayeron de Benjamín aquel día fue de veinticinco mil hombres, todos diestros en el manejo de la espada y hombres valientes. (Jueces 20, 46)

  • Los israelitas atacaron a los de Benjamín y los pasaron a espada, a los hombres, a los animales y a todo lo que encontraron. A todas las ciudades que encontraron les prendieron fuego. (Jueces 20, 48)

  • Entonces la asamblea envió doce mil hombres de los más valientes con esta orden: "Id y pasad a espada a todos los habitantes de Yabés de Galaad, a las mujeres y a los niños. (Jueces 21, 10)

  • Pero no haré desaparecer de mi altar a todos los tuyos, para que se consuman de envidia sus ojos y desfallezca de dolor su alma; y la mayor parte de tu familia morirá por la espada en la plenitud de la edad. (I Samuel 2, 33)

  • Entonces se apoderará de ti el espíritu del Señor, profetizarás con ellos y serás transformado en otro hombre. (I Samuel 10, 6)

  • Cuando llegaron a Guibeá se encontraron con un grupo de profetas; el espíritu del Señor se apoderó de Saúl, y profetizó como ellos. (I Samuel 10, 10)

  • Al oír Saúl estas cosas, el espíritu de Dios se apoderó de él y se encendió en cólera. (I Samuel 11, 6)

  • Por eso cuando llegó el día del combate ninguno de los que seguían a Saúl y Jonatán tenía espada o lanza. Sólo la tenían ellos dos. (I Samuel 13, 22)

  • Saúl y toda su gente se reunieron y avanzaron hasta el lugar del combate y vieron que la confusión era enorme, pues volvían su espada unos contra los otros. (I Samuel 14, 20)


“A mansidão reprime a ira.” São Padre Pio de Pietrelcina