Encontrados 695 resultados para: israelitas

  • a fin de que los israelitas vieran que es bueno caminar en pos del Señor. (Eclesiástico 46, 10)

  • Como se separa el sebo en el sacrificio de reconciliación, así fue David separado de los israelitas. (Eclesiástico 47, 2)

  • Desaparecerán los fortines de Efraín, el reino de Damasco; y el residuo de Siria quedará como la gloria de los israelitas -oráculo del Señor omnipotente-. (Isaías 17, 3)

  • Aquel día tus ciudades quedarán desiertas como las de los heveos y amorreos, que fueron abandonadas ante los israelitas; se convertirán en un desierto. (Isaías 17, 9)

  • Y traerán de todos los pueblos, como ofrenda al Señor, a todos vuestros hermanos -a caballo, en carros, en literas, a lomos de mulos o de dromedarios- a mi santo monte, Jerusalén -dice el Señor-, de igual modo que los israelitas traen la ofrenda en vasos puros al templo del Señor. (Isaías 66, 20)

  • Sin embargo, vienen días -dice el Señor- en que ya no se dirá: "¡Vive el Señor, que sacó a los israelitas de Egipto!", (Jeremías 16, 14)

  • sino "¡Vive el Señor, que trajo a los israelitas de las regiones del norte y de todos los países en que los había dispersado!". Yo los restableceré en la tierra que había dado a sus padres. (Jeremías 16, 15)

  • Vienen días -dice el Señor- en que no se dirá ya: "Vive Dios, que sacó a los israelitas de Egipto", (Jeremías 23, 7)

  • Porque el pueblo de Israel y el pueblo de Judá tan sólo han hecho desde su juventud lo que me desagrada; sí, los israelitas no han hecho más que irritarme con las obras de sus manos -dice el Señor-. (Jeremías 32, 30)

  • En aquellos días, en el tiempo aquel -dice el Señor-, israelitas y judíos vendrán juntos; harán su camino llorando en busca del Señor, su Dios. (Jeremías 50, 4)

  • Esto dice el Señor omnipotente: Oprimidos están los israelitas y los judíos; todos los que los han hecho cautivos los retienen y se resisten a soltarlos. (Jeremías 50, 33)

  • como habías hablado por medio de tu siervo Moisés, el día en que le ordenaste escribir tu ley en presencia de los israelitas, diciendo: (Baruc 2, 28)


“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina