Encontrados 262 resultados para: profeta Natán

  • El resto de la historia de Ezequías y sus obras de piedad están escritas en la visión del profeta Isaías, hijo de Amós, en el libro de los reyes de Judá y de Israel. (II Crónicas 32, 32)

  • Hizo lo que es malo a los ojos del Señor, su Dios, y no quiso humillarse delante del profeta Jeremías, el cual hablaba en nombre del Señor. (II Crónicas 36, 12)

  • Entonces llamé a los jefes Eliezer, Ariel, Semayas, Elnatán, Jarib, Natán, Zacarías y Mesulán, hombres sensatos, (Esdras 8, 16)

  • Selemías, Natán, Adayas. (Esdras 10, 39)

  • Me acordé de las palabras del profeta Amós, hablando de Betel: "Vuestras fiestas se cambiarán en luto, y vuestros cantos de gozo en lamentaciones". Y lloré. (Tobías 2, 6)

  • Tobit exclamó: "¡Dios te conserve sano y salvo, hermano! No te molestes si he querido conocer la verdad acerca de tu familia. Eres de nuestros hermanos, de buena y noble alcurnia. Conozco a Ananías y a Natán, los dos hijos del gran Semayas. Íbamos juntos a Jerusalén, juntos rezábamos allí, y nunca se han descarriado. Tus hermanos son buenos, tu familia es noble. ¡Bienvenido seas!". Y (Tobías 5, 14)

  • Cuando el profeta Natán vino a él después de su pecado con Betsabé (Salmos 51, 2)

  • No vemos ya nuestras banderas, ya no hay ningún profeta, y nadie sabe lo que esto durará. (Salmos 74, 9)

  • y amontonaron las piedras en el monte del templo, en lugar conveniente, hasta que viniera un profeta y dijera lo que había que hacer con ellas. (I Macabeos 4, 46)

  • que los judíos y los sacerdotes a una habían resuelto que Simón fuera su caudillo y sumo sacerdote hasta la aparición de un profeta acreditado; (I Macabeos 14, 41)

  • Encontramos escrito en los documentos que el profeta Jeremías mandó a los deportados tomar del fuego antes dicho; (II Macabeos 2, 1)

  • Se dice también en los documentos que el profeta, ilustrado por revelación de Dios, mandó que llevaran tras él el tabernáculo y el arca. Salió hasta el monte a donde Moisés había subido para contemplar la tierra prometida por Dios. (II Macabeos 2, 4)


“Faltar com a caridade¨¦ como ferir a pupila dos olhos de Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina