Encontrados 67 resultados para: tiendas

  • Subían con sus rebaños y tiendas como una nube de langosta y lo destruían todo; sus camellos eran innumerables. (Jueces 6, 5)

  • Urías le respondió: "El arca, Israel y Judá habitan en tiendas; mi señor Joab y los oficiales de mi señor acampan al aire libre, ¿e iba yo a ir a mi casa para comer, beber y dormir con mi mujer? Por el Señor y por tu vida, que no haré tal cosa". (II Samuel 11, 11)

  • Se encontraba allí un hombre perverso, llamado Sebá, hijo de Bicrí, un benjaminita, que tocó la trompeta y dijo: "Nosotros no tenemos parte con David, nosotros no tenemos herencia con el hijo de Jesé. ¡Cada uno a sus tiendas, Israel!". (II Samuel 20, 1)

  • Cuando Ben Hadad se enteró de esta respuesta, estaba con los reyes, bebiendo en las tiendas, y mandó a sus súbditos: "¡A formar!". Y formaron contra la ciudad. (I Reyes 20, 12)

  • Al mediodía se hizo una salida, mientras que Ben Hadad estaba en sus tiendas bebiendo y borracho, con los treinta y dos reyes que le ayudaban. (I Reyes 20, 16)

  • Y para salvar sus vidas, se levantaron y se dieron a la fuga al anochecer, abandonando sus tiendas, sus caballos, sus asnos y el campamento, tal como estaba. (II Reyes 7, 7)

  • Fueron y gritaron a los centinelas de la puerta de la ciudad y les comunicaron la noticia de esta manera: "Hemos entrado en el campamento de los sirios y allí no hay nadie, ni se oye nada. No se ven más que caballos atados, asnos atados y tiendas intactas". (II Reyes 7, 10)

  • En tiempo de Saúl hicieron la guerra a los agareos, los derrotaron y se establecieron en sus tiendas en toda la zona oriental de Galaad. (I Crónicas 5, 10)

  • Los hombres de Esaú y los amonitas subieron y acamparon en la montaña frente a Dotán, de donde enviaron algunos al sur y al este, cara a Egrebel, cerca de Jus, que está sobre el torrente Mocmur. El resto del ejército asirio acampó en la llanura, cubriendo todo el país. Sus tiendas y su equipamiento eran una mole ingente, pues era una muchedumbre impresionante. (Judit 7, 18)

  • Cuando volvió en sí, se echó a los pies de Judit y le dijo: "Bendita seas en todas las tiendas y en todos los pueblos, que al oír tu nombre quedarán asombrados. (Judit 14, 7)

  • Cuando los que estaban en las tiendas se enteraron de lo ocurrido, se quedaron estupefactos (Judit 15, 1)

  • ¡En cambio, están tranquilas las tiendas de los saqueadores, plena seguridad para los que provocan a Dios y creen meterlo en su puño! (Job 12, 6)


“Devemos odiar os nossos pecados, visto que o amor ao Senhor significa paz”. São Padre Pio de Pietrelcina