21. Entraron, pues, en el Templo al amanecer, y se pusieron a enseñar. Mientras tanto el sumo sacerdote y sus partidarios reunieron al Sanedrín con todos los ancianos de Israel y enviaron a buscar a los prisioneros a la cárcel.





“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina