Gefunden 19 Ergebnisse für: Arrebatado

  • Jesbón era la ciudad de Sijón, el rey de los amorreos que había luchado contra un rey anterior de Moab y le había arrebatado su territorio hasta el Arnón. (Números 21, 26)

  • Tu buey será degollado delante de tus ojos y no lo podrás comer. Tu asno será arrebatado de tu misma presencia y no te lo devolverán. Tus ovejas serán entregadas a tus enemigos y nadie saldrá en tu defensa. (Deuteronomio 28, 31)

  • Si hoy la tropa hubiera comido del botín arrebatado al enemigo, ¡cuánto mayor habría sido la derrota de los filisteos!". (I Samuel 14, 30)

  • Entonces Samuel le dijo: "Hoy el Señor te ha arrebatado el poder real sobre Israel, y se lo ha conferido a otro mejor que tú". (I Samuel 15, 28)

  • David salvó todo lo que le habían arrebatado los amalecitas y, en especial, libró a sus dos mujeres. (I Samuel 30, 18)

  • Al llegar a Siquelag, David envió parte del botín a los ancianos de Judá y a sus amigos, con este mensaje: "Ahí tienen un obsequio del botín arrebatado a los enemigos del Señor". Se lo envió (I Samuel 30, 26)

  • Entonces Joás, hijo de Joacaz, recuperó del poder de Ben Hadad, hijo de Jazael, las ciudades que Jazael había arrebatado con las armas a su padre Joacaz. Joás lo derrotó tres veces, y así recuperó las ciudades de Israel. (II Reyes 13, 25)

  • Elías, por su ardiente celo por la Ley, fue arrebatado al cielo. (I Macabeos 2, 58)

  • Fue arrebatado para que la maldad no pervirtiera su inteligencia ni el engaño sedujera su alma. (Sabiduría 4, 11)

  • Un padre, afligido por un duelo prematuro, encarga una imagen de su hijo tan pronto arrebatado, y al que antes no era más que un cadáver, ahora lo honra como a un dios y transmite a los suyos misterios y ritos. (Sabiduría 14, 15)

  • tú fuiste arrebatado en un torbellino de fuego por un carro con caballos de fuego. (Eclesiástico 48, 9)

  • Nadie en la tierra fue creado igual a Henoc, porque él fue arrebatado de la tierra. (Eclesiástico 49, 14)


“O passado não conta mais para o Senhor. O que conta é o presente e estar atento e pronto para reparar o que foi feito.” São Padre Pio de Pietrelcina