Gefunden 78 Ergebnisse für: Escuchado

  • Por eso, así habla el Señor: Ustedes no me han escuchado, proclamando cada uno la liberación de su hermano y de su prójimo. Ahora, yo proclamo para ustedes una liberación -oráculo del Señor-: los dejo librados a la espada, a la peste y al hambre, y los convertiré en un motivo de horror para todos los reyes de la tierra. (Jeremías 34, 17)

  • La palabra de Jonadab, hijo de Recab, se ha puesto en práctica: él ordenó a sus hijos que no bebieran vino, y ellos no lo han bebido hasta el día de hoy, obedeciendo la orden de sus antepasados; yo, en cambio, les he hablado a ustedes incansablemente, y no me han escuchado. (Jeremías 35, 14)

  • Les envié incansablemente a todos mis servidores los profetas, para decirles: Vuelvan de su mal camino, enmienden sus acciones, no vayan detrás de otros dioses para servirlos, y entonces habitarán en el suelo que yo les he dado, a ustedes y a sus padres. ¡Pero ustedes no han inclinado el oído ni me han escuchado! (Jeremías 35, 15)

  • Así, los hijos de Jonadab, hijo de Recab, cumplieron la orden que les había dado su padre, mientras que este pueblo no me ha escuchado. (Jeremías 35, 16)

  • y la hizo venir; él obró conforme a lo que había dicho. Porque ustedes han pecado contra el Señor y no han escuchado su voz, les ha sobrevenido esto. (Jeremías 40, 3)

  • Pero ellos no han escuchado ni han inclinado su oído, a fin de convertirse de su maldad dejando de quemar incienso a otros dioses. (Jeremías 44, 5)

  • Has escuchado sus insultos, Señor, todos sus planes contra mí. (Lamentaciones 3, 61)

  • le hemos sido infieles y no hemos escuchado la voz del Señor, nuestro Dios, que nos mandaba seguir los preceptos que él puso delante de nosotros. (Baruc 1, 18)

  • Nosotros no hemos escuchado la voz del Señor, nuestro Dios, conforme a todas las palabras de los profetas que él nos envió. (Baruc 1, 21)

  • Pero nosotros no hemos escuchado la voz del Señor, que nos mandaba seguir los preceptos que él puso delante de nosotros. (Baruc 2, 10)

  • Y nosotros no hemos escuchado tu voz, que nos mandaba servir al rey de Babilonia; por eso, tú has cumplido la amenaza que habías pronunciado por medio de tus servidores, los profetas, a saber, que serían sacados de su sitio los huesos de nuestros reyes y los huesos de nuestros padres. (Baruc 2, 24)

  • Señor todopoderoso, Dios de Israel, escucha la plegaria de los muertos de Israel, de los hijos de aquellos que han pecado contra ti y no han escuchado la voz del Señor, su Dios, por lo que han caído sobre nosotros estas calamidades. (Baruc 3, 4)


“Lembre-se de que você tem no Céu não somente um pai, mas também uma Mãe”. São Padre Pio de Pietrelcina