Gefunden 153 Ergebnisse für: Jesucristo

  • Hermanos, ustedes que creen en nuestro Señor Jesucristo glorificado, no hagan acepción de personas. (Santiago 2, 1)

  • Pedro, Apóstol de Jesucristo, saluda a los que viven como extranjeros, dispersos en el Ponto, en Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia, a los que han sido elegidos (I Pedro 1, 1)

  • según la previsión de Dios Padre, y han sido santificados por el Espíritu para obedecer a Jesucristo y recibir la aspersión de su sangre. A ustedes, gracia y paz en abundancia. (I Pedro 1, 2)

  • Bendito sea Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, que en su gran misericordia, nos hizo renacer, por la resurrección de Jesucristo, a una esperanza viva, (I Pedro 1, 3)

  • así, la fe de ustedes, una vez puesta a prueba, será mucho más valiosa que el oro perecedero purificado por el fuego, y se convertirá en motivo de alabanza, de gloria y de honor el día de la Revelación de Jesucristo. (I Pedro 1, 7)

  • Por lo tanto, manténganse con el espíritu alerta, vivan sobriamente y pongan toda su esperanza en la gracia que recibirán cuando se manifieste Jesucristo. (I Pedro 1, 13)

  • también ustedes, a manera de piedras vivas, son edificados como una casa espiritual, para ejercer un sacerdocio santo y ofrecer sacrificios espirituales, agradables a Dios por Jesucristo. (I Pedro 2, 5)

  • Todo esto es figura del bautismo, por el que ahora ustedes son salvados, el cual no consiste en la supresión de una mancha corporal, sino que es el compromiso con Dios de una conciencia pura, por la resurrección de Jesucristo, (I Pedro 3, 21)

  • El que ha recibido el don de la Palabra, que la enseñe como Palabra de Dios. El que ejerce un ministerio, que lo haga como quien recibe de Dios ese poder, para que Dios sea glorificado en todas las cosas, por Jesucristo. ¡A él sea la gloria y el poder, por los siglos de los siglos! Amén. (I Pedro 4, 11)

  • Simón Pedro, servidor y Apóstol de Jesucristo, saluda a todos aquellos que, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, han recibido una fe tan preciosa como la nuestra. (II Pedro 1, 1)

  • Lleguen a ustedes la gracia y la paz en abundancia, por medio del conocimiento de Dios y de Jesucristo, nuestro Señor. (II Pedro 1, 2)

  • Porque si ustedes poseen estas cosas en abundancia, no permanecerán inactivos ni estériles en lo que se refiere al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. (II Pedro 1, 8)


“Para mim, Deus está sempre fixo na minha mente e estampado no meu coração.” São Padre Pio de Pietrelcina