Gefunden 264 Ergebnisse für: campo de Efrom

  • Por eso, ven durante la noche con toda la gente que tienes contigo y quédate al acecho en campo abierto. (Jueces 9, 32)

  • reunió sus tropas, las dividió en tres grupos y se puso al acecho en el campo. Al ver que la gente salía de la ciudad, irrumpió contra ellos y los derrotó. (Jueces 9, 43)

  • Después, Abimélec y el grupo que lo acompañaba volvieron a atacar, y tomaron posiciones frente a la puerta de la ciudad. Mientras tanto, los otros dos grupos se lanzaron contra los que estaban en el campo y los derrotaron. (Jueces 9, 44)

  • Dios escuchó la voz de Manóaj, y el Ángel de Dios se presentó otra vez a la mujer, mientras se encontraba en el campo y su marido no estaba con ella. (Jueces 13, 9)

  • Entonces llegó un anciano, que al atardecer volvía de trabajar en el campo. Era un hombre de la montaña de Efraím y residía en Guibeá como forastero, porque la gente del lugar era benjaminita. (Jueces 19, 16)

  • Los benjaminitas les salieron al encuentro, dejándose arrastrar lejos de la ciudad, y comenzaron como las otras veces a matar gente por los senderos que suben, uno a Betel y el otro a Gabaón. Así mataron a unos treinta hombres de Israel, sobre el campo raso. (Jueces 20, 31)

  • Rut, la moabita, dijo una vez a Noemí: "Déjame ir a recoger espigas al campo, detrás de alguien que me haga ese favor". "Puedes ir, hija mía", le respondió ella. (Rut 2, 2)

  • Entonces Rut se puso a recoger espigas en el campo, detrás de los que cosechaban, y tuvo la suerte de hacerlo en una parcela perteneciente a Booz, el de la familia de Elimélec. (Rut 2, 3)

  • Entonces Booz dijo a Rut: "¡Óyeme bien, hija mía! No vayas a recoger espigas a otro campo ni te alejes para nada de aquí; quédate junto a mis servidores. (Rut 2, 8)

  • Su suegra le preguntó: "¿Dónde has ido hoy a recoger espigas? ¿Dónde estuviste trabajando? ¡Bendito sea el que se interesó por ti!". Rut contó a su suegra con quién había estado trabajando y le dijo: "Estuve trabajando en el campo de un hombre llamado Booz". (Rut 2, 19)

  • Noemí le respondió: "Es conveniente, hija mía, que vayas con las servidoras de ese hombre; así nadie te molestará en otro campo". (Rut 2, 22)

  • Pero Booz añadió: "Si le compras a Noemí la parcela de campo, también tendrás que casarte con Rut, la moabita, esposa del difunto, a fin de perpetuar el nombre de este sobre su patrimonio". (Rut 4, 5)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina