Gefunden 2122 Ergebnisse für: reyes de Israel

  • Moisés, Aarón y toda la comunidad de Israel hicieron con los levitas lo que el Señor había ordenado a Moisés. (Números 8, 20)

  • Pero si tocan una sola, se reunirán contigo los jefes, es decir, los capitanes de los regimientos de Israel. (Números 10, 4)

  • Moisés dijo a Jobab, que era hijo de su suegro Reuel, el madianita: "Nosotros vamos a emprender la marcha hacia el lugar que el Señor prometió darnos. Ven con nosotros, y seremos generosos contigo, porque el Señor prometió ser generoso con Israel". (Números 10, 29)

  • El Señor respondió a Moisés: "Reúneme a setenta de los ancianos de Israel -deberás estar seguro de que son realmente ancianos y escribas del pueblo- llévalos a la Carpa del Encuentro, y que permanezcan allí junto contigo. (Números 11, 16)

  • Luego Moisés volvió a entrar en el campamento con todos los ancianos de Israel. (Números 11, 30)

  • ¿No les basta que el Señor los haya separado de toda la comunidad de Israel y los haya acercado a él, para prestar servicios en la Morada del Señor y para estar como ministros al frente de la comunidad? (Números 16, 9)

  • Moisés se levantó, fue adonde estaban Datán y Abirón, seguido de los ancianos de Israel, (Números 16, 25)

  • Todo lo que ha sido consagrado al exterminio total en Israel será para ti. (Números 18, 14)

  • Yo doy como herencia a los levitas todos los diezmos de Israel, a cambio de los servicios que prestan en la Carpa del Encuentro. (Números 18, 21)

  • Cualquiera que toque un cadáver -el cuerpo de un hombre que ha muerto- y no se purifique, mancha la Morada del Señor y será excluido de Israel. Como no ha sido rociado con el agua lustral, permanece impuro: su impureza todavía está sobre él. (Números 19, 13)

  • Moisés envió desde Cades unos mensajeros al rey de Edóm, con esta propuesta: "Así habla tu hermano Israel: ‘Tú conoces todas las dificultades con que hemos tropezado. (Números 20, 14)

  • toda la comunidad supo que Aarón había muerto. Y todo Israel lloró a Aarón durante treinta días. (Números 20, 29)


“Todas as percepções humanas, de onde quer que venham, incluem o bem e o mal. É necessário saber determinar e assimilar todo o bem e oferecê-lo a Deus, e eliminar todo o mal.” São Padre Pio de Pietrelcina