Gefunden 43 Ergebnisse für: seguía

  • Sin embargo, no desaparecieron los lugares altos: el pueblo seguía ofreciendo sacrificios y quemando incienso en los lugares altos. (II Reyes 14, 4)

  • Sin embargo, no desaparecieron los lugares altos: el pueblo seguía ofreciendo sacrificios y quemando incienso en los lugares altos. (II Reyes 15, 4)

  • Sin embargo, no desaparecieron los lugares altos: el pueblo seguía ofreciendo sacrificios y quemando incienso en los lugares altos. Jotám fue el que edificó la puerta alta de la Casa del Señor. (II Reyes 15, 35)

  • Él hizo lo que es recto a los ojos del Señor, como había hecho su padre Ozías, pero no entró en el Templo del Señor. Mientras tanto, el pueblo seguía corrompiéndose. (II Crónicas 27, 2)

  • Luego, desde el alba hasta promediar el día, leyó el libro en la plaza que está ante la puerta del Agua, en presencia de los hombres, de las mujeres y de todos los que podían entender. Y todo el pueblo seguía con atención la lectura del libro de la Ley. (Nehemías 8, 3)

  • El joven partió con el ángel, y el perro los seguía. Caminaron los dos y, al llegar la primera noche, acamparon a orillas del río Tigris. (Tobías 6, 1)

  • Lo seguía una multitud numerosa como las langostas y como los granos de arena de la tierra: su número era incalculable. (Judit 2, 20)

  • Ester, por su parte, no había manifestado de qué familia ni de qué pueblo era, de acuerdo con lo que le había ordenado Mardoqueo, porque ella seguía cumpliendo sus órdenes como cuando estaba bajo su tutela. (Ester 2, 20)

  • mientras la otra la seguía sosteniendo el ruedo de su vestido. (Ester 15, 7)

  • Y aunque él llenaba sus casas de bienes, el designio de los malvados seguía lejos de él. (Job 22, 18)

  • La multitud que iba delante de Jesús y la que lo seguía gritaba: «¡Hosana alHijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanaen las alturas!». (Mateo 21, 9)

  • Pedro lo seguía de lejos hasta el palacio del Sumo Sacerdote; entró y se sentó con los servidores, para ver cómo terminaba todo. (Mateo 26, 58)


“Amemos ao próximo. Custa tão pouco querer bem ao outro.” São Padre Pio de Pietrelcina