Gefunden 2011 Ergebnisse für: Ven
Si faltan todavía muchos años, en proporción a ellos devolverá, como precio de su rescate, una parte del precio de venta. (Levítico 25, 51)
Porque a mí es a quien sirven los israelitas; siervos míos son, a quienes yo he sacado del país de Egipto. Yo, Yahveh, vuestro Dios. (Levítico 25, 55)
El tiempo de trilla alcanzará hasta la vendimia, y la vendimia hasta la siembra; comeréis vuestro pan hasta saciaros y habitaréis seguros en vuestra tierra. (Levítico 26, 5)
Traeré sobre vosotros la espada vengadora de la alianza. Os reuniréis entonces en vuestras ciudades, pero yo enviaré la peste en medio de vosotros y seréis entregados en manos del enemigo. (Levítico 26, 25)
Yo asolaré la tierra, y de ello quedarán atónitos vuestros mismos enemigos al venir a ocuparla. (Levítico 26, 32)
Pero si nos rescata el campo, y éste se vende o otro, el campo no podrá ser rescatado en adelante. (Levítico 27, 20)
El año del jubileo volverá el campo al vendedor, al que pertenece como propiedad de la tierra. (Levítico 27, 24)
Si se trata de un animal impuro, y lo quiere rescatar según la tasación, añadirá la quinta parte al precio; pero si no es rescatado, será vendido, conforme a la tasación. (Levítico 27, 27)
Nada de lo que a uno pertenece - hombre, animal o campo de su propiedad - que haya sido consagrado a Yahveh con anatema podrá venderse ni rescatarse. Todo anatema es cosa sacratísima para Yahveh. (Levítico 27, 28)
Dijo Moisés a Jobab, hijo de Reuel el madianito, suegro de Moisés: «Nosotros partimos para el lugar del que ha dicho Yahveh: Os lo daré. Ven con nosotros y te trataremos bien, porque Yahveh ha prometido bienestar a Israel.» (Números 10, 29)
En cambio ahora tenemos el alma seca. No hay de nada. Nuestros ojos no ven más que el maná.» (Números 11, 6)
Si vas a tratarme así, mátame, por favor, si he hallado gracia a tus ojos, para que no vea más mi desventura.» (Números 11, 15)