Gefunden 256 Ergebnisse für: comer maná

  • Les contaron lo siguiente: «Fuimos al país al que nos enviaste, y en verdad que mana leche y miel; éstos son sus productos. (Números 13, 27)

  • Si Yahveh nos es favorable, nos llevará a esa tierra y nos la entregará. Es una tierra que mana leche y miel. (Números 14, 8)

  • ¿Te parece poco habernos sacado de una tierra que mana leche y miel para hacernos morir en el desierto, que todavía te eriges como príncipe sobre nosotros? (Números 16, 13)

  • No nos has traído a ningún país que mana leche y miel, ni nos has dado una herencia de campos y vergeles. ¿Pretendes cegar los ojos de estos hombres? ¡No iremos!» (Números 16, 14)

  • De las cosas sacratísimas os alimentaréis. Todo varón lo podrá comer. Lo considerarás como sagrado. (Números 18, 10)

  • También te pertenecerá la ofrenda reservada de todo lo que los israelitas den a mecer; te lo doy a ti y a tus hijos y a tus hijas por decreto perpetuo. Cualquiera que esté puro en tu casa lo podrá comer. (Números 18, 11)

  • Los primeros productos que lleven a Yahveh, de todo lo que produzca su tierra, serán para ti. Todo el que esté puro en tu casa lo podrá comer. (Números 18, 13)

  • lo podréis comer, en cualquier lugar, vosotros y vuestras familias: es vuestro salario por vuestro servicio en la Tienda del Encuentro. (Números 18, 31)

  • Escucha, Israel; cuida de practicar lo que te hará feliz y por lo que te multiplicarás, como te ha dicho Yahveh, el Dios de tus padres, en la tierra que mana leche y miel. (Deuteronomio 6, 3)

  • Te humilló, te hizo pasar hambre, te dio a comer el maná que ni tú ni tus padres habíais conocido, para mostrarte que no sólo de pan vive el hombre, sino que el hombre vive de todo lo que sale de la boca de Yahveh. (Deuteronomio 8, 3)

  • que te alimentó en el desierto con el maná, que no habían conocido tus padres, a fin de humillarte y ponerte a prueba para después hacerte feliz. (Deuteronomio 8, 16)

  • Yo había subido al monte a recoger las tablas de piedra, las tablas de la alianza que Yahveh había concluido con vosotros. Permanecí en el monte cuarenta días y cuarenta noches sin comer pan ni beber agua. (Deuteronomio 9, 9)


“O santo silêncio nos permite ouvir mais claramente a voz de Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina