Gefunden 273 Ergebnisse für: Abrahán y Sara

  • y envió a Rafael para curarlos; a Tobit, de las manchas blancas de sus ojos, para que volviese a ver la luz del cielo, y a Sara, hija de Ragüel, para darla por esposa a Tobías, hijo de Tobit, librándola del maligno demonio Asmodeo, pues correspondía a Tobías casarse con ella con preferencia a todos los demás pretendientes. Al mismo tiempo que Tobit volvía del patio de su casa, Sara, hija de Ragüel, bajaba del piso superior. (Tobías 3, 17)

  • Hijo mío, guárdate de toda inmoralidad, y ante todo elige una mujer de la raza de tus padres. No te cases con mujer extranjera, o que no sea de la raza de tus padres, pues somos descendientes de los profetas. Recuerda, hijo mío, que Noé, Abrahán, Isaac y Jacob, nuestros padres, se casaron con mujeres de su parentela y fueron bendecidos en sus hijos y su posteridad heredó la tierra. (Tobías 4, 12)

  • Rafael dijo a Tobías: "Hermano Tobías". Le respondió: "¿Qué quieres?". Le dijo: "Esta noche la pasaremos en casa de Ragüel. Es tu pariente. Tiene una hija llamada Sara. (Tobías 6, 11)

  • Cuando Tobías oyó lo que dijo Rafael y que Sara era de su raza y de la casa de su padre, se enamoró de ella. (Tobías 6, 19)

  • Edna, su mujer, y Sara, su hija, también lloraban. (Tobías 7, 7)

  • Se lavaron y se sentaron a la mesa. Tobías dijo a Rafael: "Hermano Azarías, di a Ragüel que me dé a mi pariente Sara por esposa". (Tobías 7, 9)

  • Ragüel lo oyó y dijo al joven: "Come y bebe y pasa alegre la noche, pues nadie tiene el derecho que tú de casarte con mi hija Sara. Además yo no puedo darla a otro que no seas tú, pues eres mi pariente más cercano. Pero debo decirte toda la verdad: (Tobías 7, 10)

  • Ragüel llamó a su hija Sara, la cogió de la mano y se la dio a Tobías, diciéndole: "Hazte cargo de ella, conforme a la ley y lo que está mandado en el libro de Moisés, y llévala a casa de tu padre. Que el Dios del cielo os guíe en paz". (Tobías 7, 13)

  • Ragüel dijo a su esposa Edna: "Mujer, prepara otro dormitorio y lleva allí a Sara". (Tobías 7, 15)

  • Habían salido todos, y la puerta del dormitorio estaba ya cerrada. Tobías se levantó y le dijo a Sara: "Levántate, mujer; recemos y supliquemos a nuestro Señor que tenga misericordia de nosotros y nos proteja". (Tobías 8, 4)

  • Luego tomarás la mitad de mis bienes y te irás feliz a casa de tus padres; heredarás la otra mitad cuando hayamos muerto mi mujer y yo. Ánimo, hijo, que soy ya para siempre tu padre y Edna tu madre, como lo somos de tu mujer Sara. Ánimo, hijo". (Tobías 8, 21)

  • Ragüel le entregó a Sara, su mujer, y la mitad de sus bienes: criados y criadas, vacas y ovejas, asnos y camellos, vestidos, dinero y utensilios; (Tobías 10, 10)


“Não queremos aceitar o fato de que o sofrimento é necessário para nossa alma e de que a cruz deve ser o nosso pão cotidiano. Assim como o corpo precisa ser nutrido, também a alma precisa da cruz, dia a dia, para purificá-la e desapegá-la das coisas terrenas. Não queremos entender que Deus não quer e não pode salvar-nos nem santificar-nos sem a cruz. Quanto mais Ele chama uma alma a Si, mais a santifica por meio da cruz.” São Padre Pio de Pietrelcina