Gefunden 320 Ergebnisse für: amistad con el mundo
así también Cristo, después de haberse ofrecido una sola vez para quitar los pecados del mundo, aparecerá una segunda vez, sin pecado, para dar la salvación a los que le esperan. (Hebreos 9, 28)
Por eso, al entrar en este mundo, Cristo dijo: No has querido sacrificios ni ofrendas, pero en su lugar me has formado un cuerpo. (Hebreos 10, 5)
Por la fe conocemos que el mundo fue creado por la palabra de Dios, de suerte que lo visible tiene una causa invisible. (Hebreos 11, 3)
Por la fe fue arrebatado de este mundo Henoc sin experimentar la muerte; nadie lo pudo encontrar, porque lo había arrebatado Dios. Y la Escritura dice que antes de ser arrebatado había agradado a Dios. (Hebreos 11, 5)
Por la fe Noé, divinamente advertido acerca de las cosas que todavía no se veían, movido de un religioso temor, construyó un arca para salvar a su familia; por la fe condenó al mundo y se convirtió en heredero de la justicia que se obtiene por la fe. (Hebreos 11, 7)
de quienes no era digno el mundo, errantes por los desiertos, las montañas, las cavernas y cuevas de la tierra. (Hebreos 11, 38)
Santiago, siervo de Dios y de Jesucristo el Señor, a las doce tribus dispersas por el mundo, salud. (Santiago 1, 1)
La práctica religiosa pura y sin mancha delante de Dios, nuestro Padre, consiste en visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones y en guardarse de los vicios del mundo. (Santiago 1, 27)
Mis queridos hermanos, escuchad. ¿No ha elegido Dios a los pobres según el mundo para ser ricos en la fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman? (Santiago 2, 5)
La lengua es también de fuego; el mundo de la injusticia. La lengua puesta en medio de nuestros miembros infecta todo nuestro cuerpo y prende fuego al curso de nuestra vida, cuando ella está incendiada con el fuego del infierno. (Santiago 3, 6)
Adúlteros, ¿no sabéis que la amistad del mundo es enemistad de Dios? El que quiere ser amigo del mundo se hace enemigo de Dios. (Santiago 4, 4)
Y si invocáis como Padre al que juzga imparcialmente a cada uno según sus obras comportaos respetuosamente mientras estáis de paso en este mundo. (I Pedro 1, 17)