Gefunden 226 Ergebnisse für: cuatro

  • Al moverse giraban en los cuatro sentidos sin volverse en su dirección, porque se movían hacia el lado donde daba la cabeza, sin volverse en su dirección. (Ezequiel 10, 11)

  • Todo su cuerpo, su espalda, sus manos y sus alas, así como las ruedas, estaban cuajadas de ojos todo alrededor, y cada uno de los cuatro tenía su propia rueda. (Ezequiel 10, 12)

  • Cada uno tenía cuatro caras. La primera era de querubín, la segunda de hombre, la tercera de león y la cuarta de águila. (Ezequiel 10, 14)

  • Tenían cada uno cuatro caras y cuatro alas, y bajo las alas algo que parecían manos humanas. (Ezequiel 10, 21)

  • Esto dice el Señor Dios: "Cuando yo mande contra Jerusalén estos cuatro azotes: espada, hambre, animales feroces y peste para exterminar de ella hombres y animales, (Ezequiel 14, 21)

  • Entonces él me dijo: "Profetiza al espíritu, profetiza, hijo de hombre, y di al espíritu: Esto dice el Señor Dios: ¡Ven, espíritu, de los cuatro vientos y sopla sobre estos muertos para que revivan!". (Ezequiel 37, 9)

  • era de cuatro metros, y sus pilares de un metro. El vestíbulo del pórtico estaba situado hacia el interior. (Ezequiel 40, 9)

  • A cada lado del pórtico, cuatro mesas: ocho en total, sobre las que se degollaban las víctimas, (Ezequiel 40, 41)

  • además de las otras cuatro mesas de piedra tallada para los holocaustos, de setenta y cinco centímetros de largas, setenta y cinco de anchas y cincuenta de altas. Sobre ellas se colocaban los instrumentos con los que se degollaban los holocaustos y las otras víctimas. (Ezequiel 40, 42)

  • El fogón, de dos metros de altura, y de su ángulo emergían cuatro cuernos. (Ezequiel 43, 15)

  • Tomarás de su sangre y rociarás los cuatro cuernos del altar, los cuatro ángeles del zócalo y el bordillo que rodea la base. Ésta será la purificación del altar y su expiación. (Ezequiel 43, 20)

  • Normas para el aceite: cuatro litros y medio por cada cuatrocientos cincuenta. (Ezequiel 45, 14)


“No juízo final daremos contas a Deus até de uma palavra inútil que tenhamos dito.” São Padre Pio de Pietrelcina