Gefunden 211 Ergebnisse für: vergüenza eterna

  • A desolación eterna te reduciré, no serán ya habitadas tus ciudades y sabréis que yo soy el Señor. (Ezequiel 35, 9)

  • Añadirá además, cada mañana, como ofrenda, ocho kilos y dos litros y medio de aceite para amasar la flor de harina. Es la ofrenda al Señor, una ley eterna, para siempre. (Ezequiel 46, 14)

  • Ahora no podemos abrir nuestra boca; la vergüenza, el deshonor son el destino de tus siervos y de tus fieles. (Daniel 3, 33)

  • Y queden avergonzados los que persiguen a tus siervos, sean cubiertos de vergüenza, derribado su imperio y aniquilada su potencia; (Daniel 3, 44)

  • Alabad al Señor, porque es bueno, porque es eterna su misericordia. (Daniel 3, 89)

  • Fieles del Señor, bendecid al Dios de los dioses, alabadlo y dadle gracias porque es eterna su misericordia". (Daniel 3, 90)

  • A ti, oh Señor, la justicia; a nosotros la vergüenza, como ahora la soportan los hombres de Judá, los habitantes de Jerusalén y de todo el país, próximos y lejanos, en todas las tierras donde los has dispersado por los delitos que cometieron contra ti. (Daniel 9, 7)

  • Señor, a nosotros la vergüenza, a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros padres, porque hemos pecado contra ti. (Daniel 9, 8)

  • Setenta semanas están fijadas sobre tu pueblo y tu ciudad santa, para poner fin al delito y a la injusticia, para perdonar los crímenes e instaurar una justicia eterna, para que se cumplan visión y profecía y para consagrar el lugar santísimo. (Daniel 9, 24)

  • Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra se despertarán; unos para la vida eterna, otros para la vergüenza y la ignominia perpetua. (Daniel 12, 2)

  • porque tenían vergüenza de descubrir su deseo de tener relaciones con ella; (Daniel 13, 11)

  • Descubriré su vergüenza a los ojos de sus amantes, y nadie la salvará de mi mano. (Oseas 2, 12)


Uma filha espiritual perguntou a Padre Pio: “O Senhor cura tantas pessoas, por que não cura esta sua filha espiritual?” Padre Pio respondeu-lhe em voz baixa: “E não nos oferecemos a Deus?” São Padre Pio de Pietrelcina