II Corintios, 1
1. Pablo, Apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y el hermano Timoteo, saludan a la Iglesia de Dios que reside en Corinto, junto con todos los santos que viven en la provincia de Acaya.
1. Pablo, Apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios, y el hermano Timoteo, saludan a la Iglesia de Dios que reside en Corinto, junto con todos los santos que viven en la provincia de Acaya.
“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraquíssimo com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina