7. se abrió una brecha en la ciudad. Entonces huyeron todos los hombres de guerra, saliendo de la ciudad durante la noche, por el camino de la puerta entre las dos murallas que está cerca del jardín del rey; y mientras los caldeos rodeaban la ciudad, ellos tomaron el camino de la Arabá.





“Enquanto tiver medo de ser infiel a Deus, você não será’. Deve-se ter medo quando o medo acaba!” São Padre Pio de Pietrelcina