4. o bien, uno pronuncia con los labios sin darse cuenta un juramento favorable o desfavorable, en cualquiera de las cosas que el hombre suele jurar y, al saberlo, se hace culpable de ello;





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina