2. Allí encontró a un judío llamado Áquila, oriundo del Ponto, que acababa de llegar de Italia con su mujer, Priscila, por haber decretado Claudio que salieran de Roma todos los judíos.





“Desapegue-se daquilo que não é de Deus e não leva a Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina