24. Ellos lo guardaron para el día siguiente, como Moisés les había ordenado; pero esta vez no dio mal olor ni se llenó de gusanos.





“O meu passado, Senhor, à Tua misericórdia. O meu Presente, ao Teu amor. O meu futuro, à Tua Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina