Ezequiel, 32
32. Sí, yo dejé que sembrara el terror en la tierra de los vivientes, pero yacerá en medio de los incircuncisos, junto con las víctimas de la espada, el Faraón y toda su multitud -oráculo del Señor-.
32. Sí, yo dejé que sembrara el terror en la tierra de los vivientes, pero yacerá en medio de los incircuncisos, junto con las víctimas de la espada, el Faraón y toda su multitud -oráculo del Señor-.
“A sua casa deve ser uma escada para o Céu”. São Padre Pio de Pietrelcina