Salmos, 41
10. Hasta mi amigo más íntimo, en quien yo confiaba, el que comió mi pan, se puso contra mí.
10. Hasta mi amigo más íntimo, en quien yo confiaba, el que comió mi pan, se puso contra mí.
“Seja grato e beije docemente a mão de Deus. É sempre a mão de um pai que pune porque lhe quer bem” São Padre Pio de Pietrelcina