35. Al día siguiente por la mañana, Jonatán salió al campo, según el convenio que había hecho con David. Le acompañaba un muchacho joven.





“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina