2 Samuel, 22
24. De nada se me puede acusar delante de él y me mantengo lejos del pecado.
24. De nada se me puede acusar delante de él y me mantengo lejos del pecado.
“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina