12. Tocó el cuarto ángel su trompeta, y quedó afectada la tercera parte del sol, de la luna y de las estrellas; perdieron un tercio de su claridad, la luz del día disminuyó un tercio, y lo mismo la de la noche.





“De todos os que vierem pedir meu auxílio, nunca perderei nenhum!” São Padre Pio de Pietrelcina