Fundar 39 Resultados para: Cinturón

  • Compré el cinturón, según la orden de Yavé, y me lo puse a la cintura. (Jeremías 13, 2)

  • Por segunda vez me llegó una palabra de Yavé: «Toma el cinturón que compraste y que llevas a la cintura, baja al torrente Para y escóndelo en la grieta de una roca.» (Jeremías 13, 3)

  • «Anda al torrente y busca el cinturón que te mandé esconder.» (Jeremías 13, 6)

  • Fui al torrente Para, recogí el cinturón del sitio donde lo había escondido, pero estaba podrido y no servía para nada. (Jeremías 13, 7)

  • Este pueblo malvado que no quiere escuchar mi palabra y se deja llevar por su corazón endurecido y va tras otros dioses para servirlos y adorarlos, quedará como el cinturón que ya no vale nada. (Jeremías 13, 10)

  • De la misma manera que un hombre se ciñe un cinturón a la cintura, así quise tener junto a mí a la gente de Judá para que fueran mi pueblo, mi honra, mi gloria y mi adorno, pero ellos no han escuchado.» (Jeremías 13, 11)

  • levanté los ojos y vi esto: un hombre vestido de tela de hilo con cinturón de oro puro. (Daniel 10, 5)

  • Pónganse su cinturón, sacerdotes, y laméntense. Lloren, ministros del Señor. Vengan a pasar la noche cubiertos de saco, ministros de mi Dios. Ya no se ven ofrendas ni vino en la casa de su Dios. (Joel 1, 13)

  • No lleven oro, plata o monedas en el cinturón. (Evangelio según San Mateo 10, 9)

  • En verdad, cuando eras joven, tú mismo te ponías el cinturón e ibas a donde querías. Pero cuando llegues a viejo, abrirás los brazos y otro te amarrará la cintura y te llevará a donde no quieras.» (Evangelio según San Juan 21, 18)

  • El ángel le dijo en seguida: «Ponte el cinturón y las sandalias.» Así lo hizo, y el ángel agregó: «Ponte el manto y sígueme.» (Hecho de los Apóstoles 12, 8)

  • Se acercó a nosotros, tomó el cinturón de Pablo, se ató con él de pies y manos y dijo: «Esto dice el Espíritu Santo: Así atarán los judíos al dueño de este cinturón y lo entregarán en manos de los extranjeros.» (Hecho de los Apóstoles 21, 11)


“Deus ama quem segue o caminho da virtude.” São Padre Pio de Pietrelcina