Fundar 83 Resultados para: caballo rojo

  • ¿Dónde está el que los condujo por el fondo del Océano, como a un caballo por el desierto, sin que ellos tropezaran? (Isaías 63, 13)

  • Empuñan el arco y la jabalina, son crueles y despiadados, su voz resuena como el mar, van montados a caballo, dispuestos como un solo hombre para la batalla contra ti, hija de Sión. (Jeremías 6, 23)

  • Yo escuché con la mayor atención: ellos no hablan como es debido, ni uno solo se arrepiente de su maldad, diciendo: "¿Qué es lo que hice?". Todos vuelven a sus andanzas, como un caballo que se lanza al combate. (Jeremías 8, 6)

  • ¡Ay del que dice: "Me edificaré una casa espaciosa, con pisos altos bien aireados", y luego le abre ventanas, la recubre de cedro y la pinta de rojo vivo! (Jeremías 22, 14)

  • Por el estruendo de su caída tiembla la tierra, y el eco resuena hasta el Mar Rojo. (Jeremías 49, 21)

  • Empuñan el arco y la jabalina, son crueles e implacables; su estruendo es como el rugido del mar, van montados a caballo, alineados como un solo hombre, contra ti, hija de Babilonia. (Jeremías 50, 42)

  • Pero Oholibá fue más lejos todavía con sus prostituciones: vio unos hombres esculpidos en el muro, imágenes de caldeos pintadas de rojo, (Ezequiel 23, 14)

  • Coloca luego la olla vacía sobre las brasas, para que se recaliente y el bronce se ponga al rojo vivo, para que se fundan las impurezas dentro de ella y se consuma su herrumbre. (Ezequiel 24, 11)

  • Vendrás de tu país, de los confines del norte, acompañado de pueblos numerosos, todos montados a caballo, con una enorme multitud y un ejército incontable. (Ezequiel 38, 15)

  • Asiria no nos salvará, ya no montaremos a caballo, ni diremos más ‘¡Dios nuestro!’ a la obra de nuestras manos, porque sólo en ti el huérfano encuentra compasión". (Oseas 14, 4)

  • Yo tuve una visión durante la noche: Había un hombre montado en un caballo rojo. Estaba parado entre los mirtos que se encuentran en la hondonada, y detrás de él había caballos rojos, alazanes, negros y blancos. (Zacarías 1, 8)

  • Mi ira se ha encendido contra los pastores y yo castigaré a los machos cabríos. Cuando el Señor de los ejércitos visite a su rebaño -la casa de Judá- hará de ella su caballo de honor en el combate. (Zacarías 10, 3)


“Quando te encontrares diante de Deus, na oração considera-te banhado na luz da verdade, fala-lhe se puderes, deixa simplesmente que te veja e não tenhas preocupação alguma”. São Padre Pio de Pietrelcina