Fundar 395 Resultados para: espada afilada

  • Al Angel de la Iglesia de Pérgamo escribe: Esto dice el que tiene la espada aguda de dos filos. (Apocalipsis 2, 12)

  • Arrepiéntete, pues; si no, iré pronto donde ti y lucharé contra ésos con la espada de mi boca. (Apocalipsis 2, 16)

  • Entonces salió otro caballo, rojo; al que lo montaba se le concedió quitar de la tierra la paz para que se degollaran unos a otros; se le dio una espada grande. (Apocalipsis 6, 4)

  • Miré entonces y había un caballo verdoso; el que lo montaba se llamaba Muerte, y el Hades le seguía. Se les dio poder sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con la espada, con el hambre, con la peste y con las fieras de la tierra. (Apocalipsis 6, 8)

  • «El que a la cárcel, a la cárcel ha de ir; el que ha de morir a espada, a espada ha de morir». Aquí se requiere la paciencia y la fe de los santos. (Apocalipsis 13, 10)

  • y seduce a los habitantes de la tierra con las señales que le ha sido concedido obrar al servicio de la Bestia, diciendo a los habitantes de la tierra que hagan una imagen en honor de la Bestia que, teniendo la herida de la espada, revivió. (Apocalipsis 13, 14)

  • Y seguí viendo. Había una nube blanca, y sobre la nube sentado uno como Hijo de hombre , que llevaba en la cabeza una corona de oro y en la mano una hoz afilada. (Apocalipsis 14, 14)

  • Otro Angel salió entonces del Santuario que hay en el cielo; tenía también una hoz afilada. (Apocalipsis 14, 17)

  • Y salió del altar otro Angel, el que tiene poder sobre el fuego, y gritó con fuerte voz al que tenía la hoz afilada: «Mete tu hoz afilada y vendimia los racimos de la viña de la tierra, porque están en sazón sus uvas.» (Apocalipsis 14, 18)

  • De su boca sale una espada afilada para herir con ella a los paganos; él los regirá con cetro de hierro; él pisa el lagar del vino de la furiosa cólera de Dios, el Todopoderoso. (Apocalipsis 19, 15)

  • Los demás fueron exterminados por la espada que sale de la boca del que monta el caballo, y todas las aves se hartaron de sus carnes.» (Apocalipsis 19, 21)


“Como é belo esperar!” São Padre Pio de Pietrelcina