Fundar 60 Resultados para: setenta

  • Partieron de Mará y llegaron a Elim. En Elim había doce fuentes de agua y setenta palmeras; allí acamparon. (Números 33, 9)

  • No más de setenta personas eran tus padres cuando bajaron a Egipto, y Yahveh tu Dios te ha hecho ahora numeroso como las estrellas del cielo. (Deuteronomio 10, 22)

  • Y Adoni Bézeq dijo: «Setenta reyes, con los pulgares de manos y pies cortados, andaban recogiendo migajas bajo mi mesa. Según lo que yo hice, así me ha pagado Dios.» Le llevaron a Jerusalén, y allí murió. (Jueces 1, 7)

  • Gedeón tuvo setenta hijos, nacidos de él, pues tenía muchas mujeres. (Jueces 8, 30)

  • «Decid esto, por favor, a oídos de todos los señores de Siquem: ¿Qué es mejor para vosotros, que os estén mandando setenta hombres, todos los hijos de Yerubbaal, o que os mande uno solo? Recordad además que yo soy de vuestros huesos y de vuestra carne.» (Jueces 9, 2)

  • Le dieron setenta siclos de plata del templo de Baal Berit, con los que Abimélek contrató a hombres miserables, y vagabundos, que se fueron con él. (Jueces 9, 4)

  • Fue entonces a casa de su padre, en Ofrá, y mató a sus hermanos, los hijos de Yerubbaal, setenta hombres, sobre una misma piedra. Sólo escapó Jotam, el hijo menor de Yerubbaal, porque se escondió. (Jueces 9, 5)

  • y vosotros os habéis alzado hoy contra la casa de mi padre, habéis matado a sus hijos, setenta hombres sobre una misma piedra, y habéis puesto por rey a Abimélek, el hijo de su esclava, sobre los señores de Siquem, por ser él vuestro hermano. (Jueces 9, 18)

  • para que el crimen cometido contra los setenta hijos de Yerubbaal fuera vengado y su sangre cayera sobre su hermano Abimélek, que los había asesinado, y sobre los señores de Siquem, que le habían ayudado a asesinar a sus hermanos. (Jueces 9, 24)

  • Así devolvió Dios a Abimélek el mal que había hecho a su padre al matar a sus setenta hermanos. (Jueces 9, 56)

  • Tenía cuarenta hijos y treinta nietos, que montaban setenta pollinos. Juzgó a Israel ocho años. (Jueces 12, 14)

  • De entre los habitantes de Bet Semes, los hijos de Jeconías no se alegraron cuando vieron el arca de Yahveh y castigo Yahveh a setenta de sus hombres. El pueblo hizo duelo porque Yahveh los había castigado duramente. (I Samuel 6, 19)


“Deus quer que as suas misérias sejam o trono da Sua misericórdia.” São Padre Pio de Pietrelcina