Fundar 34 Resultados para: Higuera

  • Como uva en el desierto encontré yo a Israel, como breva de higuera vi a vuestros padres. Pero al llegar a Baal Fegor se consagraron a la infamia, y se hicieron despreciables como el objeto de su amor. (Oseas 9, 10)

  • Se ha secado el viñedo, se ha agostado la higuera, el granado, la palmera, el manzano, todos los árboles del campo están secos. ¡Ha desaparecido la alegría entre los hombres! (Joel 1, 12)

  • No temáis, bestias del campo, pues ya reverdecen los pastizales del desierto, los árboles producen su fruto, la higuera y la vid dan su riqueza. (Joel 2, 22)

  • Cada cual se sentará bajo su parra, a la sombra de su higuera, y ninguno vendrá a turbar su paz; lo ha dicho el Señor omnipotente. (Miqueas 4, 4)

  • Pues la higuera no volverá a echar brotes, ni habrá más frutos en las viñas; los campos no darán nada que comer, faltará la oveja en el aprisco y en los establos no habrá vacas. (Habacuc 3, 17)

  • a ver si sigue faltando el grano en el granero, y si la vid, la higuera, el granado y el olivo no llevan fruto. Porque a partir de hoy yo os doy la bendición". (Ageo 2, 19)

  • En aquel día, palabra del Señor todopoderoso, os invitaréis mutuamente los unos a los otros a la sombra de la parra y de la higuera". (Zacarías 3, 10)

  • Vio una higuera junto al camino, se acercó a ella y no encontró más que hojas. Entonces dijo: "Jamás brote de ti fruto alguno". Y la higuera se secó en aquel mismo instante. (Mateo 21, 19)

  • Al ver esto los discípulos, admirados, decían: "¡Cómo se ha secado de repente la higuera!". (Mateo 21, 20)

  • Jesús les respondió: "Os aseguro que si tuvierais fe y no dudarais, no sólo haríais lo de la higuera, sino que si decís a este monte: Quítate de ahí y échate al mar, así se hará. (Mateo 21, 21)

  • "Aprended del ejemplo de la higuera. Cuando sus ramas se ponen tiernas y echan hojas, conocéis que el verano se acerca. (Mateo 24, 32)

  • y, viendo desde lejos una higuera que tenía hojas, fue a ver si encontraba algo en ella; pero al llegar sólo encontró hojas, pues no era tiempo de higos. (Marcos 11, 13)


“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina