Fundar 96 Resultados para: Terror

  • Terror y violencia devastan los palacios, la casa del orgulloso será desolada. (Eclesiástico 21, 4)

  • desde el que lleva púrpura y corona hasta el que se viste de burdo paño están sujetos a cólera, envidia, turbación, terror, temor de la muerte, rivalidades y querellas. (Eclesiástico 40, 4)

  • a Moisés, de bendita memoria. Lo asemejó en gloria a los santos y lo engrandeció para terror de sus enemigos. (Eclesiástico 45, 2)

  • Métete entre las rocas, escóndete en el polvo ante el terror del Señor, de su imponente majestad, cuando venga a hacer temblar la tierra. (Isaías 2, 10)

  • Se meterán en las grietas de las rocas, en los antros de la tierra ante el terror del Señor y su imponente majestad, cuando venga a hacer temblar la tierra. (Isaías 2, 19)

  • Se meterán en las grietas de las rocas y en los recodos de las peñas ante el terror del Señor y su imponente majestad, cuando venga a hacer temblar la tierra. (Isaías 2, 21)

  • Y el país de Judá será el terror de Egipto; cada vez que se le recuerde, se espantarán por la decisión que el Señor todopoderoso ha tomado contra ellos. (Isaías 19, 17)

  • Mi corazón se marea, el terror me sobrecoge; el crepúsculo que anhelaba se me ha hecho un horror. (Isaías 21, 4)

  • ¡Terror, fosa y red sobre ti, habitante de la tierra! (Isaías 24, 17)

  • El que escape al grito del terror caerá en la fosa, y el que escape de la fosa quedará preso en la red; pues las esclusas de allá arriba se abrirán y se conmoverán los cimientos de la tierra. (Isaías 24, 18)

  • os alcanzará siempre que pase. Y pasará mañana tras mañana, de día y de noche; y sólo habrá terror al conocer la noticia. (Isaías 28, 19)

  • De terror se desvanecerá su roca, y sus jefes, espantados, desertarán de su bandera, dice el Señor, que en Sión tiene su fuego, y su horno en Jerusalén. (Isaías 31, 9)


“Você deve ter sempre prudência e amor. A prudência tem olhos; o amor tem pernas. O amor, como tem pernas, gostaria de correr a Deus. Mas seu impulso de deslanchar na direção dEle é cego e, algumas vezes, pode tropeçar se não for guiado pela prudência, que tem olhos.” São Padre Pio de Pietrelcina