Fundar 105 Resultados para: cedro del Líbano

  • mandará traer para el que se va a purificar dos aves puras y vivas, madera de cedro, una cinta de lana escarlata y un hisopo. (Levítico 14, 4)

  • Tomará luego el ave viva, el cedro, la cinta de lana escarlata y el hisopo (incluida el ave viva) y los mojará en la sangre del ave degollada sobre el agua corriente. (Levítico 14, 6)

  • Para purificar la casa tomará dos aves, madera de cedro, una cinta de lana escarlata y un hisopo. (Levítico 14, 49)

  • Tomará la madera de cedro, el hisopo, la cinta de lana escarlata y el ave viva, lo mojará todo en la sangre del ave inmolada sobre el agua corriente y hará siete aspersiones sobre la casa. (Levítico 14, 51)

  • Así purificará la casa mediante la sangre del ave, el agua corriente, el ave viva, la madera de cedro, el hisopo y la cinta de lana escarlata, (Levítico 14, 52)

  • El sacerdote tomará madera de cedro, hisopo y púrpura, y lo echará en medio del fuego donde se quema la novilla. (Números 19, 6)

  • Levantad el campamento y dirigíos a la montaña de los amorreos y a todas sus regiones vecinas: la Arabá, la montaña, la Sefela, el Negueb, el litoral, la tierra de los cananeos, el Líbano, hasta el río grande, el Éufrates. (Deuteronomio 1, 7)

  • Permíteme cruzar, para ver la excelente tierra del lado de allá del Jordán, esa hermosa montaña y el Líbano. (Deuteronomio 3, 25)

  • Todo lo que pise la planta de vuestros pies será vuestro, y vuestras fronteras se extenderán desde el desierto al Líbano, desde el río Éufrates al mar Mediterráneo. (Deuteronomio 11, 24)

  • Vuestro territorio abarcará desde el desierto y el Líbano hasta el gran río, el Éufrates, y, por el oeste, hasta el mar Mediterráneo. (Josué 1, 4)

  • Cuando se enteraron de estas cosas los reyes de Cisjordania, de la montaña, de la Sefela y de toda la costa del mar Mediterráneo hasta el Líbano: hititas, amorreos, cananeos, fereceos, heveos y jebuseos, (Josué 9, 1)

  • desde el monte Pelado, que sube hacia Seír, hasta Baal Gad, en el valle del Líbano, a los pies del monte Hermón; se apoderó de todos sus reyes, a los que derrotó y dio muerte. (Josué 11, 17)


“Não se aflija a ponto de perder a paz interior. Reze com perseverança, com confiança, com calma e serenidade.” São Padre Pio de Pietrelcina