Fundar 2007 Resultados para: trono de Israel

  • Vi en la mano derecha del que está sentado en el trono un libro escrito por las dos caras, sellado con siete sellos. (Apocalipsis 5, 1)

  • Entonces, junto al trono, vi un cordero rodeado de los cuatro vivientes y de los ancianos. Estaba de pie y como degollado. Tenía siete cuernos y siete ojos (éstos son los siete espíritus de Dios enviados por todo el mundo). (Apocalipsis 5, 6)

  • Se acercó y tomó el libro de la mano derecha del que estaba sentado en el trono. (Apocalipsis 5, 7)

  • En mi visión oí la voz de una multitud de ángeles que estaban alrededor del trono, de los seres vivientes y de los ancianos; eran miles de miles, millones de millones. (Apocalipsis 5, 11)

  • Oí que todas las criaturas del cielo, de la tierra, de debajo de la tierra y del mar decían: Al que se sienta en el trono y al cordero la alabanza, el honor, la gloria y el poder por los siglos de los siglos. (Apocalipsis 5, 13)

  • Y decían a las montañas y a las rocas: Caed sobre nosotros y ocultadnos lejos de la cara del que está sentado en el trono y de la ira del cordero; (Apocalipsis 6, 16)

  • Y oí el número de los sellados de todas las tribus de Israel: ciento cuarenta y cuatro mil: (Apocalipsis 7, 4)

  • Después de esto vi aparecer una gran muchedumbre, que nadie podía contar, de toda nación, raza, pueblo y lengua. Estaban en pie delante del trono de Dios y delante del cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. (Apocalipsis 7, 9)

  • Gritaban con voz potente: La victoria es de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del cordero. (Apocalipsis 7, 10)

  • Todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, de los ancianos y de los cuatro seres vivientes. Cayeron de rodillas ante el trono y adoraron a Dios, diciendo: (Apocalipsis 7, 11)

  • Por eso están delante del trono de Dios, y le sirven día y noche en su templo; el que está sentado en el trono los cobijará bajo su tienda. (Apocalipsis 7, 15)

  • porque el ángel que está en medio del trono será su pastor y los conducirá a las fuentes de las aguas de la vida; y Dios enjugará todas las lágrimas de sus ojos". (Apocalipsis 7, 17)


“Devemos odiar os nossos pecados, visto que o amor ao Senhor significa paz”. São Padre Pio de Pietrelcina