6. En cuanto a ti, hijo de hombre, no les temas ni tengas miedo de lo que digan, porque estás entre cardos y espinas, y sentado sobre escorpiones; no tengas miedo de lo que digan ni te acobardes delante de ellos, porque son un pueblo rebelde.





“Deve-se caminhar em nuvens cada vez que se termina uma confissão!” São Padre Pio de Pietrelcina