61. Rebeca y sus sirvientas montaron en los camellos y siguieron al hombre. Este tomó consigo a Rebeca, y partió.





“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina