3. De allí David se fue a Mispé de Moab y dijo al rey de Moab: "Deja que mi padre y mi madre vivan entre ustedes, hasta que yo sepa lo que Dios va a hacer conmigo".





“Viva feliz. Sirva ao Senhor alegremente e com o espírito despreocupado.” São Padre Pio de Pietrelcina