31. y envió disimuladamente mensajeros a Arumá, donde estaba Abimélec, para avisarle: "Gaal, hijo de Ebed, ha llegado a Siquém con sus hermanos, y está sublevando la ciudad contra ti.





“Desapegue-se daquilo que não é de Deus e não leva a Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina