Ezequiel, 16
19. El pan que yo te había dado, la flor de harina, el óleo y la miel con que te alimentaba lo presentaste ante ellas, como ofrenda de perfume agradable, dice el Señor Dios.
19. El pan que yo te había dado, la flor de harina, el óleo y la miel con que te alimentaba lo presentaste ante ellas, como ofrenda de perfume agradable, dice el Señor Dios.
“É difícil tornar-se santo. Difícil, mas não impossível. A estrada da perfeição é longa, tão longa quanto a vida de cada um. O consolo é o repouso no decorrer do caminho. Mas, apenas restauradas as forças, é necessário levantar-se rapidamente e retomar a viagem!” São Padre Pio de Pietrelcina