10. Tomaron, pues, cenizas de un horno, se presentaron a Faraón, y Moisés las lanzó hacia el cielo. Luego aparecieron úlceras y tumores infecciosos en hombres y animales.





“Desapegue-se daquilo que não é de Deus e não leva a Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina