Löydetty 49 Tulokset: daño

  • Habló entonces Jonatán a su padre en favor de David y le dijo: «No hagas daño, rey, a tu siervo David, porque él no te ha hecho ningún daño, sino grandes servicios. (1 Samuel 19, 4)

  • Entonces David dijo a Abisaí: «Sebá, hijo de Bikrí, nos hará más daño que Absalón. Toma, pues, a los hombres de mi guardia y persíguelo para que no se nos escape, refugiándose en alguna ciudad fortificada.» (2 Samuel 20, 6)

  • Diciéndoles: No toquen a mis elegidos, ni hagan daño a mis profetas. (1 Crónicas 16, 22)

  • Querían hacerme algún daño; pero les mandé a decir: «Estoy muy ocupado en un trabajo muy importante. No bajaré hacia donde ustedes se encuentran, porque se pararía el trabajo si lo dejara.» (Nehemías 6, 3)

  • Voy a presentarme a Holofernes, jefe del ejército de ustedes, para hablarle con sinceridad y mostrarle el camino para apoderarse de toda la montaña sin que ninguno de sus hombres sufra daño o pierda su vida.» (Judit 10, 13)

  • Nadie te hará daño; te tratarán bien como a los siervos de mi señor, el rey Nabucodonosor.» (Judit 11, 4)

  • Eso es lo que quiero y te pido. Pues todos nosotros hemos sido condenados al exterminio, a la matanza y al aniquilamiento. Si sólo hubiésemos sido condenados a ser esclavos o peones, me habría quedado callada, pero resulta que ahora nuestro enemigo no podrá reparar el daño que con ello va a hacer al rey.» El rey la interrumpió para preguntarle: (Ester 7, 4)

  • Oigo todo el día palabras hirientes, no piensan más que en hacerme daño. (Salmos 56, 6)

  • "No toquen a los que me he consagrado, a mis profetas no les hagan daño." (Salmos 105, 15)

  • Los hombres de la fortaleza tenían bloqueados a los israelitas en torno al Templo y trataban siempre de hacerles daño; además constituían una fuerza favorable a los paganos. (1 Macabeos 6, 18)

  • Porque no pueden dormir si no hacen el mal; no descansan en tanto no le hayan hecho daño a alguien. (Proverbios 4, 16)

  • El que confía inmediatamente es un cabeza hueca, el que cede al pecado se hace daño a sí mismo. (Sirácides (Eclesiástico) 19, 4)


“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina