Löydetty 242 Tulokset: servicio sagrado

  • de todos los de treinta años hasta los cincuenta, aptos para prestar servicio en la Tienda de las Citas. (Números 4, 30)

  • Esto es lo que han de transportar y éste es el servicio que ellos prestarán en la Tienda de las Citas: los tablones de la Morada, sus travesaños, columnas y basas; (Números 4, 31)

  • las columnas que rodean el atrio con sus basas, clavos y cuerdas: todos sus utensilios y todo lo necesario para su servicio. Señalarán con nombre cada uno de los objetos que han de transportar. (Números 4, 32)

  • Este es el servicio de los clanes meraritas. En todo lo referente al servicio de la Tienda de las Citas, estarán a las órdenes de Itamar, hijo de Aarón.» (Números 4, 33)

  • de todos los de más de treinta años hasta los cincuenta, aptos para prestar servicio en la Tienda de las Citas. (Números 4, 35)

  • de todos los de treinta años hasta los cincuenta, aptos para el servicio en la Tienda de las Citas. (Números 4, 39)

  • Por orden de Yavé cada uno fue registrado señalándole su servicio y lo que debía transportar. El censo se hizo tal y como Yavé había mandado a Moisés. (Números 4, 49)

  • «Recibe todo esto de su mano para el servicio de la Tienda de las Citas. Dáselo a los levitas, a cada uno según su servicio.» (Números 7, 5)

  • Pero no dio ni buey ni carreta a los hijos de Quehat, porque estaban a cargo del servicio del santuario y llevaban su carga al hombro. (Números 7, 9)

  • Entonces Aarón ofrecerá a los levitas, como se le presenta una ofrenda mecida, pues son ellos los que estarán a cargo del servicio de Yavé. (Números 8, 11)

  • Desde ese momento cuidarán del servicio en la Tienda de las Citas. Los purificarás y los presentarás como se presenta una ofrenda mecida, (Números 8, 15)

  • A partir de este momento los levitas se hicieron cargo del servicio en la Tienda de las Citas, a las órdenes de Aarón y sus hijos. Como Yavé lo había mandado a Moisés, así se hizo con los levitas. (Números 8, 22)


“Todas as percepções humanas, de onde quer que venham, incluem o bem e o mal. É necessário saber determinar e assimilar todo o bem e oferecê-lo a Deus, e eliminar todo o mal.” São Padre Pio de Pietrelcina