Löydetty 242 Tulokset: servicio sagrado

  • Serán socios de ustedes en todo el servicio de la Tienda, pero no se aproximarán a los objetos sagrados, ni al altar, pues de lo contrario será la muerte para ellos y ustedes. (Números 18, 3)

  • Los acompañarán a ustedes en el servicio de la Tienda de las Citas, en todo lo que concierne al servicio de la Tienda, pero ningún profano se unirá a ustedes. (Números 18, 4)

  • Ustedes asegurarán el servicio del santuario y el del altar. De ese modo no se desencadenará sobre los israelitas la cólera de Dios. (Números 18, 5)

  • Yo mismo escogí a sus hermanos los Levitas de en medio de los israelitas para dárselos. Son donados de Dios para servir en la Tienda de las Citas. Tú, y tus hijos contigo, desempeñarán su ministerio en todo lo que se refiere al altar y a lo que pasa detrás de la cortina. Ustedes asegurarán su servicio y ese sacerdocio es un don que les hago; el extraño que quisiere meterse en eso, morirá". (Números 18, 6)

  • A los hijos de Leví les doy como herencia todos los diezmos de Israel, a cambio del servicio que presten, es decir, del servicio de la Tienda de las Citas. (Números 18, 21)

  • Los levitas son quienes asegurarán el servicio de la Tienda de las Citas y cargarán con la falta si existiese: es una regla perpetua de generación en generación. Por eso no tendrán heredad entre los Israelitas. (Números 18, 23)

  • Pondrán comérselo en cualquier parte, ustedes y su familias: es su salario por el servicio que prestarán en la Tienda de las Citas. (Números 18, 31)

  • No plantarás tronco sagrado ni árbol alguno cerca del altar que levantes para tu Dios. (Deuteronomio 16, 21)

  • El hombre que se atreva a actuar en otra forma y no escuche al sacerdote que se encuentra allí al servicio de Yavé, ni al juez, morirá. Harás desaparecer el mal de Israel. (Deuteronomio 17, 12)

  • podrá oficiar en el nombre de Yavé, su Dios, como todos sus hermanos levitas que están allí al servicio de Yavé; (Deuteronomio 18, 7)

  • No habrá entre las hijas de Israel prostituta sagrada, ni prostituto sagrado entre los hijos de Israel. (Deuteronomio 23, 18)

  • Si un hombre está recién casado, no irá a la guerra ni se le molestará con otro servicio. Que esté exento de todo durante un año para así quedar en su casa y hacer feliz a su esposa. (Deuteronomio 24, 5)


“Para consolar uma alma na sua dor, mostre-lhe todo o bem que ela ainda pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina