Löydetty 722 Tulokset: Iba

  • La recubrirás de oro puro por dentro y por fuera, y pondrás alrededor de ella, en la parte de arriba, una moldura de oro. (Exodo 25, 11)

  • Ellos tendrán las alas extendidas hacia arriba, cubriendo con ellas la tapa; y estarán uno frente a otro, con sus rostros vueltos hacia ella. (Exodo 25, 20)

  • También harás fuentes, vasos, jarras y tazas de oro puro para las libaciones. (Exodo 25, 29)

  • que estarán unidos, de abajo hacia arriba, hasta la altura de la primera argolla. Así se hará con los dos bastidores destinados a los dos ángulos. (Exodo 26, 24)

  • Con el primer cordero ofrecerás también la décima parte de una medida de harina de la mejor calidad, amasada con un litro sesenta de aceite puro de oliva, y una libación consistente en un litro sesenta de vino. (Exodo 29, 40)

  • El otro cordero lo ofrecerás a la hora del crepúsculo, con una oblación y una libación iguales a las de la mañana, como aroma agradable, como ofrenda que se quema para el Señor. (Exodo 29, 41)

  • No ofrecerán sobre él incienso profano, ni holocaustos, ni oblaciones, ni derramarán sobre él ninguna libación. (Exodo 30, 9)

  • Entonces Moisés dijo: "Reciban hoy la investidura sacerdotal de parte del Señor, uno a costa de su hijo, otro a costa de su hermano, y que él les de hoy una bendición". (Exodo 32, 29)

  • Y siempre que iba a presentarse delante del Señor para conversar con él, se quitaba el velo hasta que salía de la Carpa. Al salir, comunicaba a los israelitas lo que el Señor le había ordenado, (Exodo 34, 34)

  • que estaban unidos de abajo hacia arriba, hasta la altura de la primera argolla. Así lo hicieron con los dos bastidores destinados a los dos ángulos. (Exodo 36, 29)

  • Los querubines tenían las alas extendidas hacia arriba, y con ellas cubrían la tapa; estaban uno frente al otro, con sus rostros vueltos hacia ella. (Exodo 37, 9)

  • Finalmente, hizo los utensilios de oro puro que debían estar sobre la mesa: las fuentes, los vasos, las tazas y los jarros para las libaciones. (Exodo 37, 16)


“O grau sublime da humildade é não só reconhecer a abnegação, mas amá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina